Rocío Bueno
Su materia prima principal es la imagen fotográfica, la cual concibe como una herramienta de comunicación para establecer diálogos abiertos de ida y vuelta. Le fascina su naturaleza anacrónica y polisémica, así como su capacidad de proyección e identificación. Le interesa hibridarla con otras disciplinas como el dibujo, el collage, la escultura, la pintura o la poesía. Aborda temas relacionados con sus procesos de género como mujer, tales como la maternidad, los miedos, los condicionantes, la rabia contenida, la furia latente, los vínculos, la herencia o los referentes, los cuales están presentes en sus trabajos. En todos ellos, la memoria y el archivo están muy presentes. La memoria es concebida como algo vivo, en constante cambio y movimiento, mientras que el archivo actúa como un contenedor de memoria desde el cual resignificar y construir puentes con y desde el presente. La fotografía hunde sus raíces y muestra el pasado, pero lo que se siente y se hace con ella está y tiene que ver con el presente de cada individuo.